24 Nov 2025 El presidente del Centro Español de Mediación (CEM), Rafael Catalá, ha destacado en una entrevista con El Economista el papel clave de la mediación tras la entrada en vigor de la Ley Orgánica 1/2025. La nueva normativa impulsa un cambio de cultura jurídica al exigir que, antes de demandar, las partes intenten un medio adecuado de solución de controversias, lo que abre una oportunidad para empresas, especialmente pymes y compañías familiares, de resolver sus conflictos de forma más ágil, económica y preservando sus relaciones.En la entrevista, Catalá ha subrayado que esta reforma no solo persigue aliviar la carga de trabajo de los juzgados, sino también pasar de una “cultura del litigio” a una cultura del diálogo, la negociación y el acuerdo. Ha indicado que, frente a procedimientos que pueden prolongarse hasta cinco años y alcanzar costes de decenas de miles de euros, un intento de mediación puede desarrollarse en cuestión de semanas y con un coste aproximado de unos mil euros para ambas partes.Además, el presidente del CEM ha destacado el valor de la mediación para las pymes y para las empresas familiares, donde “los conflictos entre socios suelen tener más un componente afectivo que estrictamente material”. En estos casos, la intervención de un tercero neutral facilita el diálogo y la búsqueda de soluciones que preserven tanto el negocio como las relaciones personales.No obstante, Catalá ha advertido del riesgo de que el requisito de procedibilidad se vacíe de contenido y se convierta en un mero trámite formal, por ejemplo, a través del simple envío de un burofax sin verdadera negociación de buena fe.En materia de formación, el presidente del CEM ha insistido en que la mediación exige habilidades específicas en negociación y gestión del conflicto. Según Catalá. España dispone ya de un amplio colectivo de profesionales formados y de numerosas instituciones que ofrecen servicios de mediación, pero “hay más instituciones que casos de mediación”, lo que evidencia que el gran reto sigue siendo la difusión y la creación de una auténtica cultura del acuerdo.En este contexto, el CEM se posiciona como “una institución clave para el fomento, la divulgación y la formación en mediación”, especialmente entre las pymes. Su misión, como ha indicado, no se limita a ofrecer servicios de mediación, sino también a informar y sensibilizar a las empresas, a través de jornadas, presencia territorial y actividades divulgativas.Accede a la entrevista completa, aquí.